Las orientaciones e hitos
Este año marca el trigésimo aniversario de nuestra independencia. Este es un hito importante, que marca el resurgimiento de la condición de Estado kazajo y la adquisición de la libertad, cuyos sueños fueron acariciados por muchas generaciones de nuestros antepasados. Según los estándares de la historia, 30 años es solo un instante. Sin embargo, para muchos pueblos, este período incluyó toda una era llena de dificultades y victorias, crisis y logros. Nosotros también estamos pasando por este camino.
El punto de inflexión que estamos viviendo obliga a todo ciudadano concienzudo a pensar en las preguntas clave: ¿Qué hemos logrado en estos 30 años? ¿Qué país dejaremos para las generaciones futuras? ¿Qué más hay que hacer para fortalecer nuestra estadidad? Para ello, necesitamos mirar atrás, repensar críticamente nuestro camino, arreglar nuestros logros y problemas, definir metas y objetivos para seguir avanzando con pasos seguros para el futuro.
Treinta años de la Independencia se pueden dividir aproximadamente en tres décadas. Cada uno de estos períodos tiene su propio significado histórico especial.
Describiría la primera década de la Independencia como el momento de sentar las bases para un nuevo Kazajstán. Bajo el liderazgo de Elbasy, se aprobaron los símbolos estatales y se formó un sistema de poder efectivo. Se introdujo la moneda nacional. Se han creado las Fuerzas Armadas. Se adoptó la Ley Fundamental del país. Estableció relaciones diplomáticas con estados extranjeros. Kazajstán se ha convertido en miembro de organizaciones internacionales de renombre.
Se adoptó la Estrategia “Kazajstán-2030”. Se ha determinado la frontera estatal con nuestro vecino del este. Se iniciaron intensas negociaciones fronterizas con otros estados vecinos. Nos hemos convertido en un territorio libre de armas nucleares. Trasladaron la capital a la tierra de Saryarka. La economía cambió a una trayectoria de mercado, se consolidó la institución de la propiedad privada y se sentaron las bases para el desarrollo de los negocios nacionales. Los jóvenes kazajos comenzaron a estudiar en las principales universidades del mundo. Se creó el Fondo Nacional, cuyas reservas luego nos ayudaron a sobrevivir a más de una crisis. Exhortamos a los compatriotas de todo el mundo a regresar a su patria histórica, creando las condiciones para su reasentamiento. Como resultado, nuestro país comenzó a revivir, el espíritu nacional se fortaleció.
La segunda década es un período de expansión de los horizontes de nuestra condición de Estado. A lo largo de los años, las posiciones del país se han fortalecido significativamente y el potencial económico ha crecido. Hemos formalizado legalmente todas las fronteras terrestres. Implementamos el programa de Patrimonio Cultural, repensamos nuestra historia. Recuperamos el norte del Aral, evitando que el mar desapareciera. Iniciamos la celebración de congresos de líderes de religiones tradicionales y del mundo, organizamos una cumbre de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa, promovemos las actividades de la Conferencia sobre Interacción y Medidas de Fomento de la Confianza en Asia e implementamos varios otros proyectos internacionales importantes. Atrajimos importantes inversiones extranjeras. La nueva capital, construida a orillas del río Esil, se ha convertido en un símbolo nacional. Lanzamos grandes proyectos de infraestructura, como la construcción del corredor internacional Europa Occidental - China Occidental. La construcción de viviendas se desarrolló a un ritmo sin precedentes.
En la tercera década, hemos alcanzado alturas aún mayores en nuestro desarrollo. Finalmente hemos resuelto todos los problemas relacionados con la frontera estatal. Se adoptó la Estrategia “Kazajstán-2050”, que delineaba el objetivo de ingresar a los treinta principales países desarrollados del mundo.
Se han implementado programas a gran escala en diversas áreas, incluido el programa de desarrollo industrial forzado e innovador, “Nurly Zhol”, y “100 pasos concretos”. Junto con las reformas políticas y económicas, prestamos especial atención a la modernización espiritual.
Todos estos logros fueron posibles gracias al liderazgo de Elbasy, la sabiduría y la unidad de nuestro pueblo, el trabajo minucioso de todos los compatriotas. Podemos decir que Elbasy se ha convertido en un símbolo eterno de nuestra Independencia.
Los principales objetivos de la cuarta década son un estado fuerte y una nación competitiva. Para ello, es necesario continuar las reformas políticas y económicas y el proceso de modernización de la conciencia pública para formar una identidad nacional cualitativamente nueva, adaptada a los desafíos de la época.
Estamos construyendo una sociedad justa y un estado eficaz. Guiados por los principios de equidad en todos nuestros asuntos, sin duda lograremos nuestros objetivos. Es innecesario estar orgulloso de los logros y éxitos internacionales de nuestro país sin mejorar la calidad de vida de las personas. Todos los ciudadanos deberían experimentar los beneficios reales del desarrollo económico. Sigo este principio con cada decisión. Además de mejorar la situación social de la población, también es de gran importancia proteger los derechos y garantizar la igualdad de oportunidades para todos los ciudadanos. A mi entender, este es un estado justo.
Históricamente, cada generación ha tenido sus propios desafíos. Nuestros antepasados sobrevivieron “Aktaban shybyryndy”, “Algakul sulamany”, pasaron por una terrible hambruna, represión, guerra mundial.
Durante el período del totalitarismo, casi perdimos nuestras tradiciones, idioma y religión. Gracias a la independencia pudimos reactivar y fortalecer nuestros valores. Pero si queremos sobrevivir como nación y como estado, las generaciones presentes y futuras deben estar preparadas para nuevos desafíos.
La pandemia actual y la crisis subsiguiente han demostrado claramente que el mundo entero se enfrenta hoy a desafíos sin precedentes. Además de las amenazas económicas, sociales, ambientales, biológicas y de otro tipo, varios “virus ideológicos” se están propagando ampliamente. En una era de rápida globalización, es cada vez más difícil reconocer su impacto negativo. En otras palabras, muchos quedan imperceptiblemente atrapados en peligrosas ilusiones, perdiendo la esencia. Por lo tanto, sin dejar de ser parte de la comunidad mundial, debemos ser sensibles a nuestras raíces. No podemos apartarnos de nuestra cultura original y tradiciones únicas que conforman nuestra identidad nacional. Solo protegiéndolo y fortaleciéndolo, podremos preservarnos en el caos de la civilización.
Conocimiento y tradiciones
Hoy los pares de Independencia cumplieron 30 años. Nacieron y crecieron en un país soberano, tienen una mente abierta. Tienen una cosmovisión y un estilo de vida completamente diferentes. Para ellos, la Independencia es un axioma. Este es un fenómeno normal, que testimonia el arraigo del concepto de soberanía en la mente de los jóvenes. Sin embargo, para que la comprensión del valor de la Independencia quede impresa para siempre en la memoria de las generaciones más jóvenes, deben saber a qué costo la obtuvimos.
Encontramos la libertad gracias a la heroica lucha de nuestros antepasados. Muchas dificultades y pruebas recayeron sobre ellos. Es importante conservar estas páginas de la historia en la memoria del pueblo.
En un momento, el programa “Madeni Mura” (“Patrimonio cultural”) abrió el camino para repensar la historia nacional. La ciencia histórica nacional se desarrolló dinámicamente, se llevaron a cabo numerosos estudios. Se ha introducido en la circulación científica una serie significativa de fuentes históricas y artefactos arqueológicos previamente desconocidos. Los nuevos descubrimientos mostraron al mundo entero que nuestra historia se remonta a siglos. Las iniciativas fundamentales de Elbasy han contribuido enormemente a la reactivación de la conciencia histórica de nuestro pueblo. Se ha publicado una gran cantidad de libros como parte del programa. Pero, ¿los resultados de este colosal trabajo son conocidos por el gran público? ¿No se convirtieron estas obras en propiedad exclusiva de institutos de investigación y centros científicos?
Los frutos de una investigación tan fundamental deben ser estudiados y utilizados no solo por especialistas limitados. Es necesario hacer que este conocimiento único sea comprensible y accesible para una amplia audiencia. Después de todo, una profunda conciencia histórica no es prerrogativa de los historiadores profesionales. Todo el pueblo, especialmente los jóvenes, debería tenerla. Al mismo tiempo, es importante no dejarse llevar por exposiciones de gran formato y otros proyectos de alto perfil. Se debe poner énfasis en la preparación de obras que sean sencillas y fáciles de percibir por los niños y jóvenes. Tomemos, por ejemplo, documentales y largometrajes. Sí, se rodaron películas como “Espada de diamante”, “Zhau Zhurek Myn Bala”, “Tomiris”, “Keiki Batyr”, “Tar Zaman”. Pero esto no es suficiente.
Instruyo a las agencias gubernamentales responsables y los canales de televisión nacionales para que envíen una cierta parte de contratos del Estado para la creación de obras sobre temas históricos. Por supuesto, es importante resolver el tema de la financiación. Pero, por ejemplo, nuestros hermanos kirguises a través de la película “Kurmanzhan Datka” demostraron claramente que se puede hacer un producto de alta calidad sin gastar mucho dinero.
Hoy en día, en la industria cinematográfica mundial, se demandan escenarios sobre temas históricos. Se rodaron muchas películas sobre eventos importantes en la historia de América y Europa. Ahora Netflix, HBO y otras compañías cinematográficas globales están dirigiendo su atención a Asia. Nuestra historia también es rica en tramas únicas que pueden formar la base de películas a gran escala. Por ejemplo, la era de la Horda Dorada, que fue uno de los imperios más poderosos de su tiempo, ¿no es este un escenario ya hecho? Estos temas deberían ser el centro de atención especial de los especialistas de la industria cinematográfica.
Las ideas de la estadidad y el servicio desinteresado a la Patria deben reflejarse en todas las obras históricas, tanto documentales como de ficción. Un ejemplo de esto son las actividades de destacados representantes del movimiento Alash. A principios del siglo pasado, hicieron una gran contribución a la promoción de la idea de la Independencia, convirtiéndose en víctimas en el camino hacia la libertad.
En el marco del aniversario de la Independencia, cabe destacar especialmente el papel de personalidades tan destacadas, que aportan su rica herencia a nuestra juventud y al mundo entero.
También es importante apoyar y apreciar adecuadamente el trabajo de los científicos y escritores que trabajan en este tema. Es necesario estudiar constantemente la rica herencia de los líderes del movimiento Alash.
Ya han pasado 100 años desde la dramática hambruna de 1921-1922, como resultado de la cual millones de personas murieron o se vieron obligadas a huir para sobrevivir. Si esta terrible tragedia no hubiera sucedido, el número de nuestro pueblo habría sido muchas veces mayor de lo que es ahora.
Estas páginas de nuestra historia son todavía espacios en blanco y no se han estudiado en su totalidad. Incluso entre los científicos no hay consenso sobre el número real de víctimas. Varias interpretaciones de las fuentes y causas de la hambruna masiva son engañosas para la sociedad. Los documentos históricos relevantes y los datos disponibles deben examinarse y analizarse en detalle.
Es necesario que especialistas calificados participen sistemáticamente en dicha investigación, sobre la base de la cual el estado podría dar una evaluación objetiva de esta tragedia. Debemos abordar este complejo tema con moderación y responsabilidad. En general, este trabajo debe realizarse desde un punto de vista científico verificado, sin eslóganes ruidosos y sin populismo.
Este año se cumplen 35 años desde los famosos eventos de diciembre de 1986. En 1986, los hijos e hijas del pueblo kazajo, sin miedo a la ira del régimen soviético, tomaron las calles para defender el honor de la nación. Es simbólico que exactamente 5 años después se proclamara nuestra Independencia. Necesitamos apreciar y de todas las formas posibles popularizar el coraje y la hazaña de los héroes de Zheltoksan.
Hasta fin de año, celebraremos una serie de aniversarios importantes de nuestra historia moderna.
En 1991, se cerró el sitio de pruebas nucleares de Semipalatinsk. Considero necesario realizar un evento especial dedicado a este evento, dada su excepcional importancia para el futuro no solo de nuestro país, sino de toda la humanidad. Gracias al decreto firmado por Elbasy, Kazajstán se convirtió en el líder del movimiento mundial por el desarme nuclear, se ganó la confianza de las principales potencias y fue reconocido como un miembro responsable de la comunidad internacional.
“No hay nada más lejano que el pasado, no hay nada más cercano que el futuro”, dice la sabiduría popular. No solo la era de los khans y kagans es cosa del pasado, nuestro camino creativo durante los últimos 30 años ya se está convirtiendo en historia. Si para la generación que estuvo en los orígenes de la Independencia, la historia de los noventa es comprensible, para las nuevas generaciones el significado histórico de esos años no es obvio. La independencia de los jóvenes se da desde el nacimiento, un regalo del destino. Sin embargo, en realidad, todo es diferente.
Las circunstancias políticas, económicas, sociales, demográficas y de otro tipo de esa época requirieron decisiones excepcionalmente equilibradas de Elbasy. Pasamos por un período difícil en el que parecía que no había salida a la crisis, pero creamos nuestro estado independiente sin conflictos ni derramamiento de sangre. Las generaciones presentes y futuras siempre deben recordar esto. Por lo tanto, es muy importante estudiar profundamente la historia moderna de Kazajstán.
Al mismo tiempo, a pesar del tremendo trabajo realizado para comprender nuestra propia historia durante los años de la Independencia, esta actividad debe continuar. Ha llegado el momento de escribir la historia nacional, teniendo en cuenta los nuevos enfoques científicos. Este trabajo fundamental debería constituir la base de todos los libros de texto. Este es un asunto de importancia estratégica. Por lo tanto, es necesario comenzar a preparar de inmediato una nueva publicación académica sobre la historia de Kazajstán. El resurgimiento de nuestra conciencia histórica depende de esto. En este trabajo deberían participar historiadores reconocidos.
También propongo escribir una breve historia de Kazajstán para un público extranjero y traducirla a los principales idiomas del mundo. Esta es la única manera de contarle al mundo la verdadera historia centenaria del pueblo kazajo.
Cada nación debe escribir su propia historia, sin sucumbir a la influencia de una ideología ajena. La historia, escrita desde el punto de vista de los intereses nacionales, contribuye al despertar de la identidad nacional.
La sociedad y los valores
La tríada eterna de nuestra soberanía es nuestra vasta tierra que se extiende desde Altai hasta Atyrau, desde Alatau hasta Saryarka, nuestro idioma empapado en la leche materna y nuestra unidad, que nos ayuda a superar todas las dificultades. Mantenemos estos tres valores como la niña de nuestros ojos.
Nuestra tierra sagrada, heredada de nuestros antepasados, es nuestra principal riqueza. Nadie nos la “regaló”. La historia nacional no comenzó en 1991 ni en 1936. Nuestros antepasados vivieron aquí durante la época del kanato kazajo, durante la era de la Horda Dorada, el kaganato turco, los hunos, los sakas. En otras palabras, las raíces de nuestra historia nacional se remontan al pasado. La historia debe ser tratada por historiadores, no por políticos.
La aprobación oficial de las fronteras estatales mediante la celebración de tratados bilaterales y el reconocimiento de este hecho por parte de la comunidad mundial solo ha sido la práctica de los últimos siglos. Antes de eso, ni siquiera existían conceptos como delimitación o demarcación.
Vale recordar que cuando comenzamos a tratar el tema de la frontera estatal, algunos políticos y figuras públicas instaron a no apresurarse con esto: decían, que en esos temas se puede acordar después. Sin embargo, de inmediato iniciamos las negociaciones y la consolidación de los acuerdos alcanzados. El tiempo ha demostrado la corrección de este enfoque. Como resultado, no importa quién diga algo ahora, Kazajstán tiene fronteras reconocidas internacionalmente, consagradas en acuerdos bilaterales. Nadie puede discutir esto.
Debemos transmitir y promover esta idea de manera consistente, sin emociones innecesarias. Es importante responder adecuadamente a todas las acciones de provocación que pongan en duda nuestra integridad territorial y buenas relaciones de vecindad, no solo desde el punto de vista del público en general, sino también a nivel oficial.
Debe hacerse especial hincapié en la labor educativa. Al mismo tiempo, quiero enfatizar una vez más: debemos estar dispuestos a defender los intereses nacionales no solo a través de la diplomacia, sino también desde una posición más dura.
Como ya he señalado, hemos resuelto completamente el problema de la frontera. Tras la firma en 2018 de la Convención sobre el Estatuto Jurídico del Mar Caspio, finalmente se determinaron y fijaron nuestras fronteras no solo en tierra, sino también en el mar.
Kazajstán no se divide en las partes sur, norte, oeste y este. Estos son solo nombres condicionales de áreas que indican una dirección geográfica. En 2018, mediante el Decreto de Elbasy, la región del sur de Kazajstán pasó a llamarse Turkestán. La conveniencia de este paso desde el punto de vista de restaurar la continuidad histórica es obvia. Esta decisión fue ampliamente apoyada en la sociedad. Después de todo, no solo la ciudad en sí, sino toda esta región se ha llamado Turkestán desde la antigüedad. Esta experiencia probablemente debería repetirse en todo el país, pero debería hacerse un enfoque muy equilibrado de este tema.
La tierra de Kazajstán nunca será transferida ni vendida a extranjeros, esto es un axioma. Todo ciudadano de nuestro país debe comprender claramente este hecho.
La moratoria sobre ciertas disposiciones del Código de Tierras expira el próximo año. Es muy importante poner en circulación la tierra agrícola y utilizarla en beneficio de la población. Por eso, este año es necesario crear una comisión de temas territoriales, dentro de la cual se encontrará una solución consensuada.
La tierra es el mayor valor para nosotros. ¡¿Pero realmente sabemos cómo apreciarlа?! El amor por la propia tierra no se mide con consignas ruidosas. Desafortunadamente, nosotros mismos a menudo contaminamos nuestras montañas, lagos y vastas estepas. Hacemos hogueras en Kokzhailau, casi destruimos el lago único Kobeytuz. También hay quienes matan a los saigas qu constan en el Libro Rojo por el bien de sus cuernos. Después de todo esto, ¿cómo podemos llamarnos los dueños de esta tierra? Incluso los extranjeros no le hacen esto. Sea lo que sea, pero esta es la amarga verdad. Solo con hechos concretos demostraremos que somos dueños celosos de nuestra tierra. El respeto por la naturaleza debe manifestarse no solo a través de medidas ambientales a gran escala de carácter nacional. Es importante comenzar con cosas simples: básicamente no ensuciar y no quemar fuegos.
Todo comienza con la educación. Si un niño no plantó árboles con sus padres, no vio la actitud amable de los adultos hacia los animales, entonces no cuidará de su tierra natal cuando crezca. No se trata tanto de observar las normas ambientales y legales como de la educación patriótica y la formación de la conciencia cívica.
Del estudio y conocimiento de todos los lugares únicos y hermosos de su país, comienza el verdadero amor por la Patria. En cada rincón de nuestro país puede encontrar paisajes pintorescos: en el oeste – Bozzhyra y Sherkala, en el sur – Aksu-Zhabagly y Sairam-Ogem, en Zhetysu – Khan Tengri y Charyn, Kolsai y Kayindy, Kapal-Arasan, Altynemel y Burkhan Bulak, en el este – Muztau y Shyngystau, manantiales Markakol y Rakhmanovskie, en Saryarka – Burabay y Bayanauyl, Ulytau y Karkaraly, en el norte – Imantau y Aiyrtau… Y esta no es una lista completa. No es necesario buscar el paraíso en una tierra extranjera. Nosotros mismos lo tenemos todo. Debemos mostrar a los jóvenes toda la belleza de nuestra naturaleza, enseñarles a respetarla.
Hay un problema más que debe resolverse sin perder el tiempo. Debido a la reubicación masiva de personas a las ciudades, la población ha disminuido drásticamente, especialmente en los asentamientos fronterizos. Se está trabajando sistemáticamente para crear condiciones favorables para la migración de residentes desde las regiones del sur hacia el norte y el este. Este es un tema muy urgente con respecto a la seguridad de nuestro país. Además, es necesario intensificar el proceso de reasentamiento de compatriotas en las regiones mencionadas, que se ha ralentizado en los últimos años.
Ambos temas son de importancia estratégica. No pueden ser tratados de forma irresponsable. Las autoridades locales deben hacer este trabajo no para obtener buenas estadísticas, sino desde el punto de vista de los intereses del estado y del pueblo.
Uno de los principales símbolos del país es el idioma estatal. El hecho de que el idioma kazajo tenga el estatus de idioma estatal se expresó claramente en nuestra Constitución en los años 90. Hemos creado todas las condiciones para su desarrollo. Durante este período, el número de escuelas y otras instituciones educativas, jardines de infancia con el idioma de instrucción kazajo ha aumentado significativamente.
Hoy en día, la proporción de kazajos y representantes de otros grupos étnicos que hablan el idioma del estado ha aumentado significativamente. Se han formado todas las bases legales para la formación del idioma kazajo como factor unificador. La cuestión aquí está en el deseo y la motivación. La rapidez con la que el idioma kazajo se convertirá en el idioma de la comunicación interétnica depende tanto de las propias personas, que se esfuerzan por dominarlo, como del gobierno, que crea las condiciones para lograr este objetivo.
La literatura infantil juega un papel importante en el aprendizaje de idiomas. Por lo tanto, junto con las mejores creaciones de escritores kazajos, debe iniciarse la traducción, publicación y distribución de las mejores obras de escritores extranjeros. La demanda de ellas es alta.
El conocimiento del idioma del estado es un deber y una obligación de todos los ciudadanos de Kazajstán. En este sentido, quiero hacer un llamamiento a todos los kazajos, incluidos los compatriotas que aún no hablan el idioma kazajo. Vemos que los jóvenes pueden aprender inglés u otros idiomas en poco tiempo.
Todos los que querían aprender el idioma kazajo ya lo saben. Pero, como dice en el pueblo: “Más vale tarde que nunca”. Lo principal es mantener el entusiasmo.
El uso generalizado del idioma kazajo no significa ninguna restricción en el uso de otros idiomas, especialmente el ruso. Para todos los grupos étnicos de nuestro país, se seguirán creando oportunidades para preservar sus tradiciones y desarrollar idiomas. Los jóvenes deben entender que hablar varios idiomas les abre amplios horizontes.
En todo momento, gracias a la unidad, hemos superado las pruebas. Debido a diversas circunstancias históricas, un gran número de representantes de diferentes grupos étnicos viven en la tierra kazaja. El pueblo kazajo no dividió a nadie en amigos y enemigos, ayudó a todos como hermanos. Hoy todos tenemos una Patria – Kazajstán. Pudimos convertir la multiétnica del país en nuestra ventaja competitiva. Hemos refutado las previsiones convencionales de muchos expertos extranjeros sobre la explosión del “barril de pólvora de Eurasia” y el destino del estado fallido. La labor eficaz de la Asamblea del Pueblo de Kazajstán desempeñó un papel fundamental en el fortalecimiento y preservación de la paz y la estabilidad. Nunca hemos señalado a nadie por su origen étnico, creando igualdad de condiciones y oportunidades de desarrollo para todos. Por tanto, nuestra política interétnica es reconocida en todo el mundo. Debemos valorar la unidad de nuestro pueblo. Este es el único camino correcto hacia un futuro exitoso.
Preservar la armonía interétnica es tarea no solo de los organismos estatales, sino también de toda la sociedad, de cada ciudadano. Todos tenemos la misma responsabilidad por la estabilidad y el bienestar de nuestro país.
Debemos promover constantemente valores comunes, ideas que unan a nuestra gente. Deben estar firmemente arraigados en la mente de todos los ciudadanos. En este sentido, se debe desarrollar el concepto de celebrar Nauryz Meiramy y se debe enriquecer el contenido de esta maravillosa fiesta. Mientras más valores se consoliden en nuestra sociedad, más fuerte será nuestra unidad.
Edificación y principios
Existe una demanda creciente en la sociedad de una participación más activa en la vida del país y en el proceso de toma de decisiones. Mi concepto de un “estado oyente” y la iniciativa de crear un Consejo Nacional de Confianza Pública son una respuesta directa para ello. Continúa la tradición de las grandes reuniones en Ordabasy, Kultobe, Ulytau. Estas iniciativas formarán la base para un mayor desarrollo de la sociedad civil. Nos ocupamos de estos problemas de forma sistemática. Este es el resultado de una política orientada a democratizar el país y modernizar el sistema político.
Las reformas políticas no son cuestión de un día ni siquiera de un año, pero tampoco pueden prolongarse. Las autoridades deben sentir siempre su responsabilidad hacia la gente. Pasamos a la elección de los akims (alcaldes) rurales, que fortalecerán el sistema de autogobierno local, comenzando desde las bases. Después de eso, celebraremos elecciones de akims regionales. Si el nuevo sistema muestra su eficacia, pasaremos a la elección de akims del siguiente nivel.
Es inaceptable que la imposición de la modernización política, las consignas populistas conduzcan a una crisis del sistema estatal. A partir de la experiencia de algunos países, podemos ver hacia dónde está conduciendo el repentino cambio de paradigma. La ley y el orden deben reinar en nuestro país sobre la base del pleno respeto de los derechos humanos. Obviamente, la anarquía y la permisividad no conducirán al bien.
El sistema político de Kazajstán se está desarrollando de acuerdo con los requisitos modernos. Las próximas elecciones al Mazhilis (cámara baja del Parlamento) es un paso importante hacia el desarrollo de un Parlamento multipartidista. Hay partidos en el país que se apoyan en diferentes plataformas ideológicas: conservador, liberal, patriota, socialista, etc. Este es un proceso natural. El pluralismo político promueve el desarrollo y fortalecimiento del estado de manera evolutiva. Varias fuerzas políticas de nuestro país están unidas por un valor común – la independencia sagrada.
Nuestro objetivo es dejar a la próxima generación con un estado fuerte con una economía poderosa y bases espirituales y morales sólidas. Para que Kazajstán siga avanzando, debemos educarlo en el espíritu de patriotismo y devoción por los intereses nacionales.
El siglo XXI es una era de nuevos conocimientos y tecnologías. Cada persona puede aumentar su competitividad solo mejorando continuamente, dominando nuevas profesiones y adaptándose constantemente a los dictados de los tiempos. El conocimiento y la tecnología son los principales motores del progreso del país. Abay (gran poeta kazajo) dijo que “una persona puede alcanzar el éxito solo gracias a su razón, conocimiento, conciencia y carácter. Pensar de otra manera es una gran estupidez”.
A lo largo de los años de la Independencia, ha crecido toda una generación de jóvenes kazajos talentosos, que han recibido reconocimiento en todo el mundo. Forman la imagen cultural moderna de Kazajstán. Representan a nuestro país en la arena internacional y encarnan los valores de la Independencia. Son nuestro “poder blando”. Tenemos la responsabilidad de cuidar y apoyar a cada uno de ellos.
En la era de la globalización, el mundo entero se ha convertido, de hecho, en una “gran aldea”. Se ha convertido en la norma para nuestros ambiciosos hombres y mujeres jóvenes esforzarse por obtener una educación en las mejores universidades del mundo. Algunos se quedan ahí. En este sentido, se teme que jóvenes talentosos abandonen el país. Pero estoy seguro de que nuestros jóvenes conciudadanos regresarán a su tierra natal, enriquecidos con nuevos conocimientos y experiencia, o representarán adecuadamente los intereses de Kazajstán en el extranjero.
En el pueblo se dice: “Tener oportunidades, viajar y explorar el mundo”. En un momento, Elbasy fue a Ucrania, donde adquirió una importante experiencia laboral, adquirió conocimientos y habilidades invaluables. Yo también fui a estudiar a Moscú, trabajé en otros países. Muchos de nuestros contemporáneos, como los jóvenes de hoy, estudiaron en diferentes ciudades de la Unión Soviética. Sin embargo, la gran mayoría no se quedó allí para siempre. Regresaron a casa, trabajaron en nombre de su tierra natal.
Por lo tanto, no hay que preocuparse por perder a nuestros jóvenes. Nuestra tarea es educar a la generación joven en el espíritu del patriotismo y orientar sus esfuerzos por el bien del país, dondequiera que se encuentren. Por ejemplo, para nuestros compatriotas que trabajan en las empresas más avanzadas de los países desarrollados del mundo, se deben crear las condiciones para transferir experiencia y conocimiento a sus pares en Kazajstán.
No todos los jóvenes talentosos quieren irse al extranjero. El número de jóvenes altamente capacitados y bien educados está creciendo en el país. Muchos de ellos en el futuro serán incluidos en la cohorte de los nuevos líderes progresistas del país. La reserva de personal presidencial, creada por mi iniciativa, es una vívida confirmación de esto. En la siguiente etapa del proyecto, prestaremos especial atención a la selección de líderes enfocados en las necesidades de la sociedad. Todos los que están en el poder deben, en primer lugar, guiarse por los intereses nacionales.
“Mientras seas joven, trabaja”, se dice en nuestro pueblo. La juventud en todo momento es un generador de nuevas ideas, un motor de cambio positivo. Por lo tanto, debemos dirigir este potencial creativo de la generación más joven en la dirección correcta y usarlo de manera efectiva. En este sentido, conviene intensificar la actividad del Consejo de la Juventud bajo el Presidente. Lo convertiremos en una plataforma eficaz para atraer a jóvenes educados y activos. Además, propongo establecer una subvención “Tauelsizdik Urpaktary” (“Descendientes de la independencia”) en apoyo de los jóvenes kazajos con talento.
Todo lo que hacemos, lo hacemos por el bien de las generaciones futuras. Al perseguir la política estatal, somos profundamente conscientes de nuestra responsabilidad con el futuro. Siempre nos adheriremos a esta posición. Sin duda, los mayores logros se alcanzan gracias al amor ilimitado por la Patria. El verdadero patriotismo no es un eslogan ruidoso, sino un servicio diario a su país y su pueblo.
El hombre no nace patriota. Se vuelve uno, recibiendo la formación y educación adecuadas, socializando y formando su identidad cívica. Una persona que siente que sus objetivos e intereses personales están en sintonía con el bien público y ve su contribución al desarrollo del país, encuentra la verdadera felicidad.
El gran hijo de nuestro pueblo, Alikhan Bukeikhanov, dijo: “Servir a la nación depende no tanto del conocimiento como del carácter”. Debemos trabajar juntos para abrazar el verdadero espíritu de patriotismo y fortalecer aún más nuestra sagrada Independencia.
Quiero hacer un llamamiento a todos los conciudadanos, especialmente a los jóvenes: ¡aprecien nuestra vasto Kazajstán, nuestra patria sagrada, donde pueden hacer realidad todos sus preciados sueños y audaces planes, y lograr el éxito! Creo en el poder creativo del patriotismo kazajo.
La independencia del estado no se limita a su proclamación o al establecimiento de las bases del estado. Construir una verdadera independencia es un trabajo arduo diario, una política coherente y bien considerada. Sobreviviremos como nación en un mundo globalizado solo si tenemos un estado fuerte e independiente. Debemos aferrarnos a esta verdad perdurable. “¡La independencia es lo más preciado!” – estas palabras deberían convertirse en nuestro lema eterno.
¡Dejemos que el fundamento sagrado de nuestra nación, la Independencia, llene de patriotismo nuestros nuevos logros!